Los parques eólicos offshore llenan las arcas reales
Aumento de ingresos para los royals británicos
El informe financiero anual de los royals británicos revela un aumento enorme en los ingresos reales. Para el rey Carlos significa arcas llenas, pero el dinero ya está planeado. En la lista de compras se incluyen, entre otras cosas, dos nuevos helicópteros.
Los royals británicos pueden esperar una considerable suma de dinero el próximo año. Según el informe financiero anual de la familia real, la cantidad que le corresponde al rey Carlos III y a su familia para el desempeño de sus funciones aumentará en 45 millones hasta llegar a 130 millones de libras (alrededor de 155 millones de euros). Esto representa un aumento de casi el 53 por ciento. El trasfondo es que los ingresos de la llamada “Crown Estate” han aumentado considerablemente. Se trata de una cartera de propiedades inmobiliarias y derechos de uso económico de la plataforma continental alrededor de la costa británica. Estos ingresos alimentan el fondo conocido como “Sovereign Grant”, con el que los royals británicos mantienen sus residencias y financian viajes oficiales al extranjero.
Los royals se benefician de los parques eólicos offshore
Principalmente, la expansión de los parques eólicos offshore en el Mar del Norte ha generado enormes sumas recientemente. La proporción que los royals reciben de estos ingresos se redujo recientemente al 12 por ciento. Aun así, la cantidad que tienen disponible está aumentando.
El dinero adicional se destinará principalmente a la renovación en curso del Palacio de Buckingham, según la familia real. En la lista de compras para este año fiscal también están dos nuevos helicópteros del tipo AgustaWestland AW139, con los que los royals viajarán a sus numerosos compromisos oficiales. Estos reemplazarán a dos helicópteros Sikorsky envejecidos. Además de los costos operativos, el año pasado hubo varios gastos importantes. Por ejemplo, la coronación costó al palacio 800.000 libras (alrededor de 950.000 euros), sin contar los costos de seguridad proporcionada por la policía y la participación del ejército. Los viajes al extranjero también representaron un costo significativo: el más caro para los contribuyentes británicos fue la visita de estado de la pareja real a Kenia. Los vuelos chárter y otros gastos superaron las 166.000 libras (casi 200.000 euros).